Una
de las trampas mas grandes del ego es hacernos pensar que lo que
hacemos es importante, que todo lo que hacemos tiene el sentido
verdadero, que los demás están en la senda equivocada y que nada de
lo que hacen corresponde a la realidad. Vivimos en un camino lleno de
luces y sombras Donde los matices del ego y los contrastes de la
mente dan forma a lo que llamamos pensamiento único que nos hace ir
en direcciones que antes pensábamos imposibles. La trampa esta
servida.
Este
mecanismo de autodefensa no es bueno ni es malo ya que es la manera
que tiene el ego de protegerse y como todo mecanismo de defensa
cumple su función. Todos tenemos en nuestro interior la semilla de
la superconfianza que le permite dejar que el humano se sienta en
libertad de hacer cuanto quiera y lo que quiera; este me mecanismo
permite hacer que pensemos que la información esta interiorizada y
profundizada lo que no es verdad porque al permitir que uno solo de
los puntos del Ser mire con fuerza hacia adentro resta energía a los
demás. Lo podremos explicar mejor así:
1,
El ego no tiene energía propia
2,
El Ser es información consciente “Uni-versal”
3,
El ego precisa de grandes cantidades de energía Psíquica para
funcionar
4.
El Ser utiliza mínimas cantidades de energía en todos sus elementos
que la componen.
5.
El ego se nutre de las sensaciones, pensamientos y emociones para su
mantenimiento
6,
El Ser al ser información consciente de si misma usa la cantidad de
energía exacta para cada uno de sus puntos.
Dicho
esto, en el momento en el que nos encaminamos en un punto de la senda
por mas verdadero que sea debemos ser conscientes el gasto energético
que provoca este y de ser alto debemos reevaluar desde el interior si
es verdadero por que según lo explicado no puede tener un gasto
excesivo de energía ya que debe ser fluido y continuo mas no
dirigido y discontinuo.
Este
mecanismo ha sido profundamente estudiado y diseñado por aquellos
creadores de este universo artificial y funciona bajo las mismas
leyes de este universo. Vamos a hablar ahora de algo que tal vez no
hayáis escuchado y que corresponde a la octava o la vía de los
“creadores del universo” entendiendo este como el universo
material que habitamos.
En
el universo material que habitamos esta hecho a medida que se puedan
cumplir las leyes universales que son contrarias a las leyes
cósmicas. Las leyes universales son todas aquellas leyes que pueden
ser medidas y cuantificadas que le permiten a los avatares o seres
que habitan este universo limitar su funcionamiento. No me extenderé
en esto pues no pensé hablar jamas de lo que aquí escribo, sin
embargo, lo veo necesario. Estas leyes universales se dividen en
Constantes y Progresivas lo que permite por un lado dar la sensación
de finitud matricial y la otra permite el desarrollo energético que
tiende al infinito dando también como resultado finitud.
Estas
leyes son complementarias y permiten por un lado el encierro y por el
otro lado que la energía se gaste en grandes cantidades por lo
cual, según lo expuesto, corresponde al universo material. Como
ejemplo vamos a hablar de la constante de planck que permite la
materialización de este universo y que corresponde en toda regla a
su “creador” la cual explica sus limites. Pueden extender esta
información a través de internet para un mejor entendimiento de la
misma a quien desee profundizar. Esta constante de planck Expresada
como (Ep = hc/λ) limita la cantidad de energía y la acción sobre
los cuerpos físicos en un tiempo de terminado; como vemos tiende a
“limitar” el funcionamiento cuántico del universo y de la
materia.
Por
otro lado están las progresivas como la serie de Fibonacci expresada
(xn = xn-1 +
xn-2) la que al contrario de la anterior no
limita pero si aumenta de manera exponencial el uso de la energía y
esta progresión permite a través de la energía mental de los
avatares crear el universo que les rodea mediante la recurrencia de
la misma, pero como vemos desgasta la energía del mismo avatar
generando recurrencias al ser un universo mental.
Estas
dos leyes como vemos cumplen su función y limitan el funcionamiento
del ser al dar la sensación de finitud. Esto funciona al existir el
tercer elemento correspondiente a la mecánica universal y que
consiste en generar vórtices para “someter” a la energía
consciente en la materia; así cuando se crea un vórtice todo lo que
esta en rededor es succionado hasta su centro lo que no rompe las
leyes cósmicas en si pero es una manera de saltarlas pues aunque
limita (lo que es contrario la ley cósmica) es la energía
consciente la que se somete a esta condición pues sus puntos de
atención no interfieren el uno con el otro permitiendo desarrollarlo
libremente de cada uno de los mismos, es decir, que si un punto mira
en una dirección los demás son conscientes de este estado pero no
lo limitan o interfieren. Este vórtice y para el caso que nos trae,
permite al Ser utilizar una cantidad de energía ingente a través de
la mente en crear una realidad lo que la limita a una posibilidad no
permitiendo fluir la misma ni interactuar con otras posibilidades
brindadas por la energía consciente del Ser y de las otras
realidades que existen y que tambien corresponden al Ser. Dicho esto, pensar que nuestro camino es el verdadero y único le resta
atención a los demás puntos, pues hemos generado un vórtice que
nos desgasta energética-mente y le resta atención a la información
consciente que le rodea.
Con
esto lo que quiero decir es que aun los buenos propósitos por mas
buenos que sean deben mantener la energía justa en sostenerlos, ir a
marchas forzadas en los mismos nos genera un efecto contrario a la
esencia del Ser pues ingresa en la materialidad del universo que
habite permitiendo separar mas la energía consciente del Ser y
limitándolo lo que es contrario a su esencia por acción de las
leyes universales que son contrarias a las leyes cósmicas.
Es
importante comprender que todos nosotros tomamos la opción de
someternos a este encierro de la materia, que aunque nuestros
hermanos estén equivocados es su experiencia, que todos nosotros de
una manera u otra alimentamos esta “realidad” que habitamos pues
subyace en la identidad propia de las leyes universales que son en si
producto de la inconsciencia y contrarias a las leyes cósmicas que
son producto de la consciencia, que cuando tratamos de reconducir a
alguien estamos rompiendo las leyes que rigen el Ser generando
recurrencias, que cuando no somos coherentes entramos en incoherencia
que también genera recurrencias, que no podemos pensar que lo que
hacemos por mas bueno que parezca no necesite mantener la atención
adecuada pues genera puntos de inflexión que crean recurrencias, que
las energías cumplen su ciclo y deben ser renovadas transformándolas, creando nuevas realidades acordes al momento lo que algunos llaman
fluir, que la creación de el universo material depende de cada uno con
el desgaste energético que es muy grande y mas si entramos en falta de
coherencia.
No
he explicado las leyes cósmicas en este articulo ni lo haré, pues
estas corresponden al Ser y determinan, explican y comprenden la
realidad que esta mas allá del universo mental; por lo cual depende
de cada uno de vosotros que sepáis esto. Solo os diré que son leyes
que jamas entran en conflicto con nada ni con nadie permitiendo una
información consciente fluida y continua.
Este
articulo lo escribo por que siento que debo hacerlo pues un gran amigo ha visto como
personas que son muy allegadas a el han desviado la senda dándole al
ego protagonismo. También he visto a muchos allegados que denostan
y denigran de todo aquel con quien no están de acuerdo y esto es
contraproducente al Propósito. Reevaluad vuestra manera de pensar
pues estáis siendo piedra de tropiezo para aquellos que de manera
silenciosa y callada están trabajando por conseguir el propósito,
que están realmente ayudando de una manera justa pero determinada a
conseguir una meta que en definitiva es la mas importante -TRASCENDER
LA MATERIALIDAD-
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